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Sueños [Versión Original Completa]

Sueños fugados de la irrealidad
Impávidos, inocuos
tachados de inútiles
Cenicientos cabellos en sus pupilas revelan mitologías fugaces
Crónicas sobre sus hazañas anuncian insectos de oro sobre los ríos de acostumbradas repeticiones

La sal desdoblada en el tic-tac del descanso los trae a la vida
un poco estéril
y las flores de lunas iracundas desesperadas le aseguran la divina eternidad
¿Y quién les dio el abismo del lenguaje en la saliva del recuerdo inconsciente?

... Filósofos juguetones, antiguos y burlones sabios, atractivos conquistadores
Ávidos de electricidad y cerebros
Talladores de signos
Consumidores de piedra y rumores
Payasos infieles, rebeldes fundadores
¿Cómo habéis sobrevivido al cerrojo ácido entre la realidad y el fantasioso trasunto?

Sueños inconcebibles
fugados de una irrealidad artística
cruzan mis nervios como esqueletos ensangrentados
pósanse densos y desinteresados en mis rutinas
envenenan mis huellas

Y mi aburrida habitación
destruyen recuerdos y ocupan su lugar, turbulentos y sin sosiego

Dispersos sellan herméticamente
El viento debajo de mi puerta
El viento detrás de mi ventana

Ahuyentan de mi ridícula burbuja las arraigadas costumbres, polvorientas y sucias
Desordenan mis papeles de cemento y ceniza podrida
Humedecen mis labios para instantáneamente cercenar mis neuronas

Agitan con espuma extraña mis palabras
Caminan sobre mis ojos cuadriculados, dando zapatazos
Estiran mi médula, saltan los libros
Queman mi tintero oscuro con rubicundos y risibles tonos
Tamborean los cristales
Rezan en llamas cánticos recién inventados, lamiendo sus huesos
Traducen mi lengua en letras espesas con tinta de incienso.

Sueños de novedad eterna
devienen cada noche tortuosos, rasgando sus osamentas brillantes
Confunden mis cálculos, revuelven los números invisibles
Succionan mis venas
Violan.
Con alaridos rodean matemáticos cadáveres

Me llevas, te llevo - Xolotl Polo










Sueños sin sexo
sin dueño

Cruzan umbrales de ocio
Latigan sabores amargos

Asesinan monotonías y rejas
Entremezclan alumbrados con carátulas serpeantes
Juegan ingrávidos con mis sumisos tributos
Con estrépito derriban pensamientos
Los atan, los cortan, los sumergen en besos y sonidos
Los torturan con sus crónicas insomnes
Les hacen ver la muerte en sus billones de formas y los desnudan sobre pelotas gigantes de ping-pong y bolsas memoriosas

Sueños inenarrables fugados de la original irrealidad
vagan confusos en caminos
pierden su paso
Reinician recorridos, prolongan y aceleran su viaje
Pisan mis zapatos y
siguen el pobre caminar del polvo que dejan atrás
Arrojan tierra a mi boca, gritan con enfado.

Se pulverizan y se funden
Danzan con sombreros de cartón incrustándose lápices en el cráneo
Y de nuevo
Se pulverizan y se funden
y así son gratos a mi estómago, nunca más
Practicando deportes arrugados en mi paladar
Conversando con viento y pegamento, y una que otra palabra
Viajantes excesivos que derraman licores en mis voces
Se abrigan en cortinas y vomitan en el reloj de pared.

Un Cualquiera
























Sueños ridículos fugados de la insistente irrealidad
vaporosos
incesantes

Elaboran esculturas en el basurero
cortejan mis pantalones y escupen mi asqueroso parpadeo
olorosos arrebujados en mis narices
hacen implosión en mis oídos con sendos instrumentos

Instrumentos de músculos diminutos, de ácidos gástricos
instrumentos membranosos con agujeros y cuerdas de lágrimas.

Quizá purifican el oxígeno que bebo o lo tornan más fétido
Quizá dejan su hogar paterno para azotarme
Quizá abandonan su perenne existencia para entremeterse en mis respiraciones
Quizá acogen mis insultos y se burlan de las soeces cartas que dibujan mi odio

Sueños bromistas
fugados de la misteriosa irrealidad

Traficantes de ilusiones
demonios y ángeles
dioses y animales

Invocantes sacerdotes con esparadrapo y alcohol en sus pupilas
domadores de bestias
incendiarios chamanes, discretos oradores

Crecen en pestañas y viven de meteoros de letras
más allá de momentos planos y usados sobreviven desterrados de convencionales frases

¡Sueños turbulentos y amontonados, fusilan mi lengua y queman mis dedos!

Xolotl Polo
























Sueños de azúcar fugados de la realidad
largos, interminables, ¿infinitos?
Cuelgan de sus árboles gajos golpeados, arraigados por el coraje
Sumergidos en mi sangre bostezan historias combinadas
Releen fluidos adversos en las uñas de sus mascotas
Que arañan y recomienzan sus raíces
¡Jugo y miel ofrezco a vuestras costillas
agua inquieta y reflexiva que me sustenta!

Sueños enigmáticos, cantantes de levadura
Sopladores de calor y desespero en mis sienes
Francotiradores de golpes suspicaces
Polvos en el agua seca, insuficientes, ineficientes
Lectores de presencias invisibles, errantes
Lúcidos vencedores de miedos de tela y tijeras
Mensajeros de orillas de alimentos y emanaciones espirituales

Sueños fugados del tiempo, del espacio
del inconsciente con uso de memoria
Romped los días de armadura
y hacedme uno de vosotros en una exhalación agónica antes de mi último latido.
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Deceso


Mira dentro de su mente
y descubre sus laberintos derrumbados,
con misterios complejísimos
en labores de parto
sobre las paredes de polvo,
esas que los pensamientos intrincados
todavía mantienen en pie,
a pesar de su escasez.

Sigue con la vista
los caminos simples
por los que transita su vida,
contempla con asombro la transparencia de sus pasos

No hay sofisticación ni enredos en sus pupilas
es un ser humano básico,
apenas levantado hacia la vida,
sólo con el aire en los ojos coloridos,
un aire diferente que nace y renace sin descanso,
un aire hambriento de mundo, de vida.

¡Un aire esperanzado
llorando sobre el romanticismo,
sobre los ideales de fuerzas desconocidas y poderosas
rigiendo el curso loable de su mañana!

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Antiguo



Antiguo agujero negro
“Recuerdos”. Xolotl Polo. Impresión. Papel algodón 100%
290 gr. 80 x 72 cm.

Estaba solo, encerrado en una increíble lucha interna contra las fuerzas de la conservación melancólica, sumido en sí mismo racionalizando el oro que podía estar a punto de perder, por culpa del presente y del futuro, de lo nuevo.

No estoy exagerando la malicia implícita y cruel de la corrupción del tiempo en su alma. Lo viejo le pudre, le carcome el espíritu. Para él los desechos del pasado son tan terribles y turbios como un río contaminado.

Esa es la razón por la que está alcoholizado y semidesnudo, sentado en medio de su habitación y escuchando ruidos que casi parecen música, en una desesperación sólo comparable a la de una madre contemplando la agonía de un hijo. Está harto de todo lo que le rodea, todo le trae recuerdos, todo es viejo e inútil.

En un arrebato de furia lo quemaría todo, lo estropearía todo; pero tiene miedo, miedo de perderlo y miedo de conservarlo. Se ruega a sí mismo tirarlo todo, y tener el espacio necesario para algo nuevo, algo sin historia, sin vejez, sin ruina ni memorias. Pero está atascado, está fuertemente atado a las maquinaciones de su memoria taciturna y depresiva.

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Deceso [Versión original]


Ven, y mira dentro de su mente, laberintos derrumbados y misterios complejísimos en labores de parto, sobre las paredes de polvo de esos laberintos que los pensamientos intrincados todavía mantienen en pie, a pesar de su escasez.

Mira los caminos básicos y simples por los que transita su vida, contempla con asombro la sencillez y la transparencia de sus pasos. No hay sofisticación ni enredos complicados en sus pupilas ni mucho menos en sus neuronas: un ser humano básico, apenas levantado hacia la vida, sólo con el aire en los ojos coloridos, un aire diferente que nace y renace sin descanso, un aire hambriento de mundo, y de vida.

¡Un aire esperanzado llorando sobre el romanticismo, los ideales y las fáciles pero imposibles ideas de fuerzas desconocidas y poderosas rigiendo el curso loable de su mañana!

Ven, y conversa con él, inocente y desprevenido. Oye sus palabras cabizbajas y apesadumbradas, oye sus ideas nada suspicaces y sus discursos flacos y crédulos. De seguro te sorprenderá su confesión, esa sobre la depresión con sus sombras terribles en la lluvia y en la noche, acechando sus descuidos y mutilando sus creencias, tomando poco a poco cada parte de él, aprovechando su vulnerable disposición en un mundo gigantesco y prácticamente desconocido, con diminutos cielos azules y tranquilos.

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Memoria

Condeno una parte de mí
al ostracismo, y con ella,
una parte también de mi memoria.
De este lado sólo tengo algunas cenizas
cuidadosamente guardadas
en un jarrón de cerámica fina.

No quiero recordar mi pasado,
no quiero apariencias de candor débiles.
No quiero responder al llamado impertinente
y celoso de mi memoria,
que se busca a sí misma
en una esperanza ciega y rota,
hechizada por la necesidad de auto-significarse
y convertirse en un futuro brillante
para así redimirse.

Tengo una cerámica para el arrepentimiento,
recubierta de oro,
pero que se desangra profusamente
desde una fuente desconocida e infinita.
Es el desamparo de quedarme sin memoria,
de perder mi esencia y mi aprendizaje.

Pero ya no quiero lecciones antiguas.
No quiero leer en las arrugas de la cerámica
valiosas enseñanzas,
que de todos modos están hechas de trapos rotos
y tristeza.

Quiero dejar de nombrar mis lecciones,
pisarlas fuerte y desecharlas;
las lloraré y las extrañaré
como en una etapa de duelo,
para luego celebrar con regocijo
y un dejo de despersonalización.

No quiero recelos y arrepentimiento,
quiero quemar esa cerámica,
junto con el remordimiento
y el dolor del pasado.

Preparo el fuego
y las llamas inundan el rito.

Justo en el instante fatal,
se me quiebran los brazos y la cerámica rueda
lejos del pequeño infierno que le he preparado.

Paisaje sombrío
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Demutāre

¿Por quién demuda aquél
Inhalando el polvo de siglos mustios
Persistiendo en la excepcionalidad de su musa?

Ha quebrado su alma tantas veces
Bajo temblores en las estrellas
Y miles de noches reflexivas
Que regresar los siglos es sólo una mudanza más

¿Por qué insiste aquél
En sacrificar sus tesoros
Frente a la mirada fija de la belleza encarnada?

¿Por qué canta aquél
Bajo la oscuridad de su voz
Sobre el trono de los bienaventurados?

Jardiel. Mansión árabe
 
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