Mostrando las entradas con la etiqueta Favoritos. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Favoritos. Mostrar todas las entradas
0 comments

Aroma [Prosa]

Quiero permanecer en esta ducha helada hasta que el agua se sienta agresiva y violenta. Quiero usar las ropas que detesto, en un baño sin desnudez, como una forma de exorcizar mis prendas, eliminando su esencia odiada.

Pero, ¿la maldición acaso no reside en este cuerpo sucio y enfermizo?

Créeme, me despojaría salvajemente de mí mismo y destruiría paranoicamente toda su superficie. Reventaría mi garganta y haría sangrar todo mi cuerpo.

Aún así, ¿sería capaz de borrar el apestoso aroma que emanan mis carnes?

"La graciosa fuga" diptico. 100 x 100 cm. Acrílico sobre lienzo www.facebook.com/Xolotl.Polo.Artist (n. 1964, México)
"La graciosa fuga" diptico. 100 x 100 cm. Acrílico sobre lienzo www.facebook.com/Xolotl.Polo.Artist (n. 1964, México)


0 comments

Marcela [Cuento]

 

Desde lejos la vi sin reconocerla, lucía bien y quizá en un universo paralelo entablaría conversación con ella basándome en su aspecto; al menos si fuese valiente. Me acerqué sin temor, pero sin mirarla; por timidez y por respeto: me irrita cuando las personas descaradamente reparan en otras sin la menor sutileza, como si estuvieran viendo un fantasma amigable o como si contemplaran el mismo ser amigable pero de una galaxia lejana, embelesadas por la luz brillante en el dedo índice – o lo que sería el dedo índice- de E.T., que estaría a punto de tocar sus rostros como jamás nadie se los tocará, por lo que deben prestar cuidadosa atención y ver cada micro-movimiento de este extraño ser. 

No pocas veces he querido ser un alienígena para aquellos amantes de seres extraños, pero uno de esos que matarían por divertimento al terrícola que más les llamase la atención.

Ella no era un ser de planetas distantes, así que no le miré de inmediato sino que pensaba detallarle disimuladamente en docenas de cortas y furtivas miradas mientras esperábamos el bus. No apenas le dirigía mi primera mirada disimuladam cuando me convertí en ese ser extraño que tanto temía, porque la descubrí viendo mi dedo índice -bueno, no mi dedo índice hinchado, enorme y brillante- pero me miraba con tal aplicación, que sólo llegue a comprenderla luego de un par de segundos cuando le reconocí, una antigua amiga de mi hermana, a la que nunca le dirigí más que formalidades vacías: hola, hasta luego. 

Quizá le pareció encantadora mi parquedad con las palabras o mi aspecto físico, porque desde que la conocí supe que le gustaba, ya que ella no podía o no quería ocultármelo: me miraba todo el tiempo casi de la misma manera en la que me miraba ahora.

Y entonces sentí como si me hubiese poseído un ser inmaterial, que sin duda era más amigable que yo, porque saludó a Marcela – así se llamaba- como si fuese una entrañable amiga a la que no veía desde que se convirtió en fantasma, o sea, hacía mucho. Le dirigió un hola emocionado y de inmediato se acercó a saludarle con la propiedad que lo hacen los buenos amigos. Yo -el poseído- me asusté porque pensé que iba a abrazarla, pero sólo le besó en la mejilla para luego hacer las preguntas de rigor.

Llegué muy rápidamente a la conclusión de que ese fantasma sólo me dejaría cuando terminara de conversar con ella, o cuando por costumbre hiciera algo ridículo, él o yo. Me resigné y le dejé hablar: me sorprendía la admiración que de repente sentía por ella –no, yo no, él- porque cada cinco minutos estaba elogiándola respecto a su personalidad o a sus costumbres, cosa que debió molestarle, o al menos, extrañarle.

El bus llegó casi vacío y yo me entretuve con la idea de sobrepasar las convenciones sociales y sentarme en una de las sillas que solo tienen un puesto, sonreí con ello y luego me entristecí porque debía sentarme al lado de ella. Después de un tiempo dejé de entristecerme ya que no tuve que hablar mucho -algo que siempre me ha sucedido luego de conquistar una impresión agradable en las personas- pues ella comenzó a relatarme las venturas y desventuras de sus amores y los hombres en su vida, tema que duró casi todo el viaje.

Me enteré de muchas cosas que no merecía conocer tan deprisa dado que era la primera vez que hablaba con ella, supongo que esto se debió en parte a las habilidades del alma invasora que me dominaba; ya que ella se sintió muy cómoda conmigo, me agarraba del brazo para apoyarse de cuando en cuando y me hacía cosquillas en el estómago cuando le hacía alguna burla graciosa e inocente.

Cuento Marcela


 

0 comments

Dolor

Ahora que estás llorando,
aunque sea de a ratos y de a poco,
deja que esas gotas tan humanas
surquen tus mejillas,
y se abran camino entre la calidez
de tu piel y tu tristeza.

Pasea un momento por el parque de tus dolencias,
abraza el tronco de tus molestias
como a un sabio y viejo maestro.

Entra entre puntapiés insensibles
y admira la armonía seca y profunda
que crean los lamentos de tu miseria.

Ve al lago melancólico,
siente su arcaico y experimentado sufrimiento,
humedece los pies en su orilla.

Y si te sientes valiente,
date un chapuzón a tu mejor estilo infantil,
que no teme y por ende disfruta más.

Aprovecha el dolor que te queda,
antes de que el sutil aroma de su ingenuidad
se disipe en tus entrañas.

Aprovecha el dolor mientras dure,
prueba suprema de tu humanidad
y el carácter sensible de tu realidad insomne y fláccida.

Aprovecha el padecimiento
antes de que se congele en tu corazón
y cicatrice deficientemente con algo de sangre y de vida,
que luego se vuelve escarcha,
como el futuro.

Hielo
0 comments

Ab Origine [Prosa]

La travesía de mil millas comienza con un paso.
Lao-Tsé

Temblores en el corazón encierran emocionados miles de pequeñas sensaciones. Atraes una brisa propicia y con ella me alejas, con suaves soplos, de la costa de mis negras melodías. Así olvido mis miradas inexpresivas, olvido también mis reflejos herméticos y frugales y la agresividad pasiva de mis tintas descuidadas.

Después de olvidar, me reúno contigo en un estanque de esperanza, porque me tranquiliza notar el brillo en tus ojos, porque contemplar el hermoso pedestal de tu piel me hace sentir privilegiado, y ese privilegio es la base de la suavidad de mis palabras.

Claro que a veces el frenesí es el que me tranquiliza.

¿Y cuál es ese frenesí? Son delirios violentos que sensibilizan mis sentidos y mi corazón. Son tus besos, tus labios, tus manos que curan. Son las caricias exaltando mi adormilamiento. Es un ánimo renovado, es el balbuceo de mis energías. Y es como si una parte de mi alma descansara en una columna sólida, como si durmiera sinuosa con el ritmo de tu respiración. Es una exquisita sorpresa, así cada nuevo minuto. Así cada nuevo beso.

Desde el principio regresar a ti es una expedición entre dimensiones, que con cada soplo de vida traducen mi felicidad tus facciones en una sonrisa. ¡Y qué bellos ojos! Son por ellos que no pasa el tiempo.

Con una nueva amistad me regalaste la oportunidad de una nueva vida con nuevos pasos y senderos. Y desde el principio camino contigo de la mano como en un baile de inmortales que celebran un nuevo lugar, un sitio cálido que es más que un ambiente perfecto, es también la calidez de algo recién hecho; es un lugar lleno de los ecos de tu dulzura… Yo he llegado a la luna.

Desde el principio, cuando conocí tu nombre, compongo una canción que mana tiernamente de mí. Es como el zumo de un fruto dulce, esa canción es como tu boca. Es un dulce reconfortante y es una boca fascinante. Y desde que me besaste, viajo en una música cantando, con ganas de una danza primitiva. Con ganas de adorar rítmicamente a una divinidad proveedora recreada mágicamente por la imaginación de los primeros hombres.

Danzo vigorosamente y adoro a mi luna con mis gritos, con mi voz, con mi sudor y con mi vivacidad, alrededor de una fogata en las primeras noches de los hombres, mirando al cielo, observando esa Luna que llena mis ojos, reflejo puro del sol y guía protectora en mi oscuridad…

Quizá se note en mis ojos el fuego de la naturaleza, que era Diosa, como la luna que ilumina sin quemar ni cegar… Y quiero que cada beso sea ese rito, que con cada contacto esté adorando la suavidad de mi luna.

Costal Moon
0 comments

Dissolutio

En tu contenedor de rabia y decepción
Pervive impasible esta llama vacilante y fría
Cruel mensajera de la noche
La que destruyó mi luna.

Se abren paso las constelaciones de la oscuridad
Sus sombras ciegas dictan la música de fondo
Y palidecen los cielos
El sol se derrite fiel hasta el último minuto
El agua mira el tiempo y se compadece,
Atenta a las últimas palabras de todo lo moribundo.

Entre la incandescencia de nuestra cercanía
El fuego se consume en medio de nuestra soledad
Y ahora nos está quemando la piel

Ya no deseo mirar
No deseo pronunciar memorables palabras
Nada fue mío
Sólo imaginé la perfección
Con las alas de una inocencia infantil

Silencio
0 comments

Melancolía

Las frías palabras,
mías o tuyas,
nunca fueron dichas...



A los que corren en un laberinto,
su misma velocidad los confunde.
Séneca


Amo la melancolía breve y perfumada.
iluminada con cierta elegancia,
con cierta fortaleza.

Se parece a una mágica tarde hecha a lápiz
De esas que te despiertan la sensibilidad
casi hasta el sufrimiento.

Me gusta recordar lo más hermoso,
tesoros antiguos
Aunque, a veces, inespecíficamente,
se bosquejan pequeñas punzadas mutiladas

No duelen, pero emanan suspiros
colmados de melancolía, pesimismo y aflicción
Todos con sus dejos de perfeccionismo.

Y a veces la gallardía de la melancolía
se funde conmigo
En silencio,
muy dentro.

Tristeza, displicencia, orgullo, dispersión.
Todas ellas gozan con movimientos desnudos,
con un placer parecido al erotismo.
He vivido con ello,
y cada día es menos difícil.
Tanto que suelo confundirme entre sus carnes.

--

Sucede, sin embargo
Que todo esto es muy complejo,
deteriora cosas.

Para ti es excesivo y desprevenido
Para mí no sobrepasa una cierta carencia de probidad.
Es un eco que tengo destinado.
Nunca se separa de mi experiencia
Si me daña, no lo noto,
como un buen vino en exceso.

--

En todo caso
estoy detenido en un laberinto
porque también arde algo maravilloso en mi juventud.

Es tu mundo.
Que también es un buen vino
Empero, infinitamente más dulce y exquisito

Tu alma evoca cosas fuera del tiempo.
Fuera de la melancolía y las lágrimas del espíritu.
Contigo he tocado el límite de un renacer
en un delirio.

¡En qué fascinante momento estamos!
¡A qué grandiosas novedades nos abandonamos!

--

No puedo protegerte de mí
Del sino que cicatriza
Más con algo de premura
mi cariño sabrá acomodarlo
De la misma manera que ha colocado tu mirada
en un esplendor despierto y lleno
con una promesa atesorada cada mañana
y con la necesidad de una carta que se relee por años.

Así que recordemos los tesoros antiguos
con sus propios consejos y pactos
Juremos cada tanto que comenzaremos caminos mejores
Tenemos la gallardía y los corazones.

Borremos los torvos actos
y las palabras de acero
y las palabras de ácido

Busquemos nuestros labios y el brillo en las pupilas
Seamos felices así no lo merezcamos
Exprimamos la calidez del mundo.
Y démosle la espalda a lo desafortunado con un abrazo.

Sí, es una peligrosa elección
¿Te arriesgas conmigo?

Hombre tocando el violín con una mujer desnuda
1 comments

Conquista


Tras tu conquista
mis alrededores se han evaporado.
Son nuevos latidos
Los que comandan mis pensamientos

En esa injusta y decisiva batalla
Aniquilaste una parte de mi realidad

Ahora tu voz se cuela entre los resquicios
de mi ambiente fragmentado.

En este nuevo mundo,
mi sangre lentamente se despierta
y se prepara para ser dirigida
y ordenada por tu tacto.

Entonces,
noble y firmemente
me impulsas una sonrisa.

Smiles
0 comments

Felicidad cotidiana

Fascinarme con tu magia
en cada palabra iluminada
en cada pensamiento recurrente
en cada locura,
dicha o pensada.

Fascinarme con tu recuerdo
en evocaciones radiantes
llenas de espacio y milenios.

Fascinarme con tus labios
haciéndolos inolvidables con cada suspiro.

Fascinarme con tu imagen
invocándote cada vez más hermosa

Es mi felicidad cotidiana.

Persona saltando en el atardecer
0 comments

Trance

Traes la novedad contigo
Traes otro mundo.

Ese, tu mundo fantástico
retoza tímidamente en mi vida
Así mi alegría
oye los cantos locos del universo.

Con esa alegría alcanzo a desorbitarme
viviendo un trance contigo.

Ese trance fascinante ha de ser nuestra historia
Una aventura que no se destruye con un sólo fracaso
Un camino que no se crea con una sola caricia.


Sunset
0 comments

Absolución

Eres una absolución

Una luz que sólo se enciende
cuando más se necesita.

Hay cosas que se desprenden de mí
cuando no estás
Tú las sostienes.

Por eso,
tengo un mundo
y un muchacho sólo para ti.

Estrellas
0 comments

Perfume

Cuando te beso
hay algo que se detiene
Y algo que se mueve más rápido,
y también algo que despierta.
Se siente delicioso,
como con un dulce quebranto adosado.

¡Qué indiferente es el tiempo
a tus caricias y a las mías!
Es la invasión de tu mirada
Que sin proponérselo reinventa la ternura

Vastas anécdotas
Reunidas en el azar y la coincidencia
Y al fondo de nuestra historia,
Lo fantástico.

Nuestros recuerdos revuelan dulcemente
El tiempo no nos percibe
Lo instantáneo se impregna de lentitud

Se llena el cofre de excepciones
Sorpresas sin afanes
Emociones
y amenas palabras.

Instantes que como fotografías
quedan impregnadas en el perfume de la memoria.

Eye - Acuarela
0 comments

Bus

Tu misterio
Laberinto eterno
aprehendiendo el silencio

… En ese lugar de piedra
y de miedo

Bajé a buscarte
En un vano intento
de redimir tu voz

The First Days of Spring (1929) is a painting by the Spanish surrealist Salvador Dalí.
0 comments

Mujer [Prosa]

Esa sensación siempre común pero tan diferente cada vez se conjuga en el arquetipo del más puro arte al percibir por cualquier sentido a una mujer, que jamás llega al hombre con una repetición monótona del mismo atractivo, sino que es muestra siempre de un interés renovado constantemente. Como si en cada mujer hubiera un perfume único, unos ojos únicos, una piel única, un cabello único.

Rasgos únicos, irrepetibles e interminablemente cautivadores, como si fuera una ilusión de los sentidos, el truco femenino del más elaborado engaño, ese que atrapa nuestra atención, envolviéndonos en una ilusión de contraste, destacando el hecho de que no podemos vivir sin ellas.

Simplemente, la mujer absorbe la atención, es un imán de estética y simplicidad perfecta, configuradas tan armoniosamente y en una criatura tan convencional entre lo exótico del universo; que existiendo millones de seres así en este planeta, cada uno es tan singular y único que su tremenda belleza no tiene comparación entre todo lo que existe.

Dios experimentó con Adán, y luego, corrigiendo todo viso de imperfección, creo el verdadero y primer ser humano a imagen y semejanza de la divinidad. La compañía del solitario primer hombre se convirtió en la obra de arte más sublime del creacionismo entero.

Mujer sexy fumando
0 comments

La razón diminuta

Furiosas tintas
desgarran las cavernas de la mente humana
Trastornando el papel sacudido por su rostro hambriento

Las corrientes de la evolución
Son tan sólo cursos sin destino
Un diminuto movimiento
Dentro del espléndido universo
acariciado ahora por la enfermiza razón
de una mente
Que busca el control imposible
Ajeno. Inaccesible.

Maniático,
se retuerce ardiente
el afán humano de analizarlo todo
Evidente anzuelo en ríos espesos
Lodo sin etiquetas


La razón agita la naturaleza
Desordenando sus superfluos placeres
Convirtiéndolos en fríos rompecabezas
Una vaga emoción restituye el sufrimiento del hombre

Su cerebro lame las paredes
Buscando la humedad de las sensaciones
Escondida en miles de palabras

Sus sentimientos
Impalpables delirios
que su letra deshace
en recuerdos polvorientos
Vaporosos entierros secretos,
inútiles como las obsesiones.

El pensamiento
que es un insecto agónico
escribiendo con la sangre que él mismo derrama
En vano intenta alzar la hoguera
con anotaciones recogidas en desesperación
al pie de la ocasión muerta.


Salvador Dalí

Entre la vigilia y el agotamiento inexplicable del sueño,
ideas aplazadas rondan los pliegues de su existencia sucesiva

El delirio nutre la hoguera con sus frágiles aciertos
y le conduce a la orilla de su tortura
Sobre una piedra riega sus débiles fantasías.

Sus planes,
como brebajes ácidos
a veces le dan sosiego
Pero casi siempre le hacen extranjero en mi propia existencia

¿Qué ritual demente ha de cumplir con el polvo de sus huesos?
¿Dónde debe derramar su sangre,
que es tinta,
para firmar en sacrificio la turbulencia de sucesos
en dónde podrá dejar de anticipar para vivir?

Sin cesar
fatiga vías holladas por sus sueños.

El hombre escribe en círculos,
frenéticamente ciego…

Time

Poema de Miguel Ángel Adarme Acevedo publicado en la revista Capital Letter. No. 16 de la Universidad Nacional de Colombia. página 29.

Encuentra la revista completa en Issuu aquí
0 comments

No soy yo

Las lágrimas no son mías,
los gritos no son míos,
son de otros.
Todo lo que se marchita
es de alguien más,
un mío que no puedo ser yo

Invento desesperadamente
cientos clonados,
cientos míos

salpicándolos con máscaras de miedo
y cobardía;
maquillándolos con la vergüenza
de sentir vergüenza.

Las debilidades y los temores
colapsan irremediablemente
contra la dureza de mis invenciones.

No hay dolor bajo mis máscaras
no hay dolor
en mis disfraces.

Desaparezco encima de otro mío
un mío clonado.
que no mira atrás,
que no deja un solo rastro.

En el tormento
de mis transformaciones
inclino la cabeza y
vuelvo a levantarla siendo alguien más.
no soy yo
nunca lo fui



La lluvia borra mis huellas
y el polvo humedecido
sepulta mis recuerdos.

Salvador Dalí

0 comments

Confusión

Contempla con asombro
la concatenación perfecta de engaños
evaporándose en mi alma
y en mi rostro

De la ilusoria ficción he creado
una orgía de lo aparente y lo oculto.
Trazas y figuras aparentes
absorben sañudamente mis identidades…

Entre configuraciones hipnóticas
enlazo la ilusión con la materia,
confundiendo interminablemente
las imaginaciones de mi inconsciente.

Entretanto,
mi rostro se curva sinuoso
entre yoes descabalados
que se confunden y unen entre sí,

Al final,
mi alma pronuncia sentencias tenebrosas
que me ponen otro nombre
y me arrancan el rostro

Salvador Dalí
0 comments

Caja de títeres

Dentro del corazón aplanado,
un catálogo de identidades.
Algunas vivieron tan sólo una noche,
o una cita romántica;
algunas son tan viejas como la cicatriz en mi brazo,
esa que me hice robando eucalipto a dos cuadras de mi casa.

Algunas hacen fila india,
esperando el turno de convertirse
en el yo del momento,
ese que parece tan consistente y fijo
a los ojos de las viejecitas,
y la gente que no vemos hace mucho tiempo.

Unas son como burbujas efervescentes:
apenas tocan la atmosfera de la materialidad
se desvanecen sin decir adiós.

Corazón

Me gusta hacer burbujas así,
cuando estoy muy feliz
o muy triste,
o sea, para situaciones extremas.

Unas me abandonaron,
otras las abandoné yo.

Las más bonitas son las más frágiles;
las más feas,
las que más uso.

No recuerdo haber tenido una sola,
siempre me parecieron un montón…

Soy una caja de títeres.
0 comments

Las arenas del rostro

¿Y qué dirá el augur
ahora cuando me he perdido irremediablemente
entre miles de sinfonías,
tan disímiles y tan frágiles como el susurrar del viento?

¿Qué podrá esperarse ahora de mí,
cuando ya me he consumido completamente,
ahogándome entre mares de plomo y tristeza,

En mares inmensos
en los que se encuentran miles de cuerpos míos,
todos devastados e inertes
como rocas a la intemperie?

Ahora las engañifas suculentas
con las que alimentaba al mundo
se alimentan de mí,
ahora soy su esclavo y su presa;
su servidor y su víctima…

Ya no soy capaz de regresar
al inicio del galimatías
que con tanta fruición
creaba
y redimía.

La confusión controlada de la que hice alarde
es ahora apenas una sinfonía
rota y dispersa
en la atmósfera,
en el desorden del que hago parte
y que también me constituye.

La faltriquera secreta
en la que reservaba mi rostro real
se ha roto,
y su contenido se dispersa ahora por el suelo,
rueda y se mezcla con la irrealidad
que no alcancé a guardar
cuando noté que mi bolsillo se desgarraba…

Lies: Optical Illusion

Poema de Miguel Ángel Adarme Acevedo publicado en la revista Capital Letter. No. 14 de la Universidad Nacional de Colombia. página 21.

Encuentra la revista completa en Issuu aquí
0 comments

Sin Rostro

Entre el rito acostumbrado
de ajustar el disfraz,
voy triturando mi cobardía,
que se ensordece con el eco perdido
del grito interior
que me reclama un día
sin antifaz… sin máscara,

un día sin camuflaje
ni engaños para el mundo.

¡Pero si esta máscara
es mi vino cotidiano,
mi mentira más fabulosa
que cuanto más fabulosa,
más mentira!

¡Pero si esta máscara
es mi sueño más lúcido
mi trampa más elaborada!

¡Pero si esta máscara
es el alborozo dulce del control,
el placer de la farsa,
la forma sublime de apariencia!

Ajusto el disfraz
Y oriento la máscara.

Se rompe un espejo.

Se quiebra mi rostro
y sonrío con la sangre a borbotones

Snow Shore

Poema de Miguel Ángel Adarme Acevedo publicado en la revista Capital Letter. No. 14 de la Universidad Nacional de Colombia. página 21.

Encuentra la revista completa en Issuu aquí
0 comments

Llanto milenario

De forma inevitable
Los guardianes de mis visiones
Han humedecido sus armaduras

Un milenio después
A pesar de la aridez de mis palabras
Los gritos de agua sobre mi rostro
Todavía permanecen intactos

Partícula de Dios
 
;