a ese ufano misterio
que como sangre
recorre las murallas
de mis notas obsesivas?
Misterio sordo
que quizá de naturaleza me viene:
... desde los más diversos fondos.
Pensamientos vedados a mis palabras
en el profundo
y extraño consciente invisible.
El áspero y, a veces, básico e indeducible
discurso frío que atemoriza,
o sorprende al inocente.
La forma escondida de la imaginación
que se enriquece con el tiempo.
El secreto asombro de una frase
vagamente presentida
entre oscuras pupilas de acero.
Misterio básico que el silencio dispersa.
Hay otros en mi sangre
Son rumores secos en la ruta oculta.
Desnudez tronchada al paso de las grandes represiones
Nómadas máscaras en la arena,
una carta trazada por inconscientes motores
y ese inconsistente sabor
de una conversación única...
Paradojas que acogen mis razones
y hay una que me ofrece su interesante deseo
El encuentro de tentaciones y reservas,
y hay unas que ofrecen la privación y el sometimiento
Ah, y esas permanentes notas capaces de evidenciar el miedo.
Hay otros en mi sangre,
propósito nada auténtico
en mi cabeza turbulenta
¿Y que oponer
ante la breve aunque profunda fruición neblinosa
desatada en una tormenta ilusoria?
Granos contradictorios de plenitud amarga
y su iluminación mediocre,
impredecible y fugaz aparición de la nada...
TODO cuanto le es desconocido a este cartógrafo de ausencias...
Por El Ilusionista
“Del sufrimiento han surgido las almas más fuertes,
los caracteres más sólidos están plagados de cicatrices”.
Kahlil Gibran