Estoy hirviendo frenéticamente por dentro. Sin embargo, mantengo el rostro sereno y la postura alegre gracias a mis disfraces perfectamente simulados. No obstante, la rabia sale a borbotones de su jaula con apariencia nebulosa.
En mi refugio destrozaré mis oídos con la más preciada música. Su placer me hundirá en el dolor como arena movediza y cantaré con delirio, más bien gritando.
Luego intentaré azotar las bestias en prisión. Tal vez escape alguna. Y tal vez esa vuelva para liberar a otra. Pero quizá, dejándolas ensangrentadas, logre encerrar a ambas.
Este es un día sin pensamientos, sin recuerdos. Vivo horas de intensa dicha incapacitada que se arrastra revoltosa sobre los monstruos de apariencia inquietante. Yo me mantengo inmóvil y con la mirada vengadora, sin desear ni sentir...
Me dispongo a liberar mis monstruos antes de que mueran o me consuman por dentro.
En mi refugio destrozaré mis oídos con la más preciada música. Su placer me hundirá en el dolor como arena movediza y cantaré con delirio, más bien gritando.
Luego intentaré azotar las bestias en prisión. Tal vez escape alguna. Y tal vez esa vuelva para liberar a otra. Pero quizá, dejándolas ensangrentadas, logre encerrar a ambas.
Este es un día sin pensamientos, sin recuerdos. Vivo horas de intensa dicha incapacitada que se arrastra revoltosa sobre los monstruos de apariencia inquietante. Yo me mantengo inmóvil y con la mirada vengadora, sin desear ni sentir...
Me dispongo a liberar mis monstruos antes de que mueran o me consuman por dentro.
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| “Momentos amargos dulce tentación” Xolotl Polo (México). Acrílico. 180 x 100 cm. 2009. |
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